Esta
ponencia aborda en forma de apuntes, de ideas prematuras y larvarias, un
intento por dilucidar ¿qué hace un payaso en el área de la salud?
La
idea fuerza que se propone es que rompe reglas, entra allí donde el paso es
restringido, ingresa aunque no sea personal autorizado, se sube en lugares
prohibidos, grita, corre, canta, desafina, habla de comida o cocina con quienes
están en ayuna, desdibuja los códigos sociales como mostrar los calzones, habla
de mocos, caca, vómitos, habla con la boca llena, roba, engaña, coquetea,
baila, promociona, vende, desordena, difumina jerarquías, se salta protocolos y
burocracias, ridiculiza, se ridiculiza…
Y
es que el payaso usa la máscara más pequeña del mundo, por tanto cubre tan poco
que la persona detrás de esa máscara queda al descubierto, su opinión, su
mirada, sus formas, todo desbaratado, sin juicios ni prejuicios, liberado de
toda norma o código social, es como usar máscara para andar sin máscara. El
payaso está ahí tal cual es también con sus contradicciones, dificultades y
oscuridades.
“El
humor es siempre transgresor (…) los humoristas somos gente peligrosa” escribía
el dramaturgo Jorge Díaz.
“Hoy
cuando la consigna es el éxito instantáneo, el retoque y la formalidad, ser clown
se transforma en subversión, en guerrilla en medio de la selva deshumanizada
(…) estos guerrilleros de la locura hacen reír con su visión de mundo y sus
intentos por posarse por encima de los fracasos” dice el director de teatro
Claudio Pueller.
“Ya
van a ver / ya van a ver / cuando los payasos / se tomen el poder” corea el
manifiesto payasista de la banda Infusión de Mate.
Pero
no se trata de la revolución payasística, no queremos imponer un nuevo (des)
orden, ni cambiar la lógica, sino que lo que estamos haciendo son pequeñas
revoluciones fallidas, insurrecciones. Éstas esporádicas, fragmentadas y
diseminadas insurgencias, más allá del fracaso tienen un enorme potencial
graficado por Hakim Bey como Zonas Temporalmente Autónomas (TAZ por su sigla en
inglés). Lo que estarían haciendo los payasos en el área de la salud, más allá
de la terapia, incluso más allá de hacer reír, es por un breve instante romper
las reglas, destruir la norma, desordenar, abrir las posibilidades sin ánimo de
que se establezca como nueva lógica, sino simplemente como una oportunidad de
experimentarla junto a otros.
Nicolás
Valiente Blamey – [watapike]
Septiembre 2016.
*Propuesta de ponencia no seleccionada para congreso en Colombia.